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12 Feb 2023
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Los mejores en castellano, seleccionados, comentados y recitados por el editor y director de Archiletras.

Arsenio Escolar

Periodista, filólogo, escritor y editor. Fundé Archiletras en 2018 tras darle vueltas al proyecto durante 35 años.

El amor, una invención poética

El amor es el asunto más recurrente de la lírica. A ningún otro tema le han dedicado tanta atención y tantos versos los poetas, en español o en cualquier otro idioma. El amor es incluso, para algunos estudiosos, una invención poética, literaria.

Jean Verdon, un historiador francés medievalista especializado en la vida cotidiana, publicó en 2006 el ensayo L’Amour au Moyen Âge. Le flesh, le sexe et le sentiment, un ensayo en el que lanza esta tesis: el amor, tal como hoy lo entendemos, fue una invención de los trovadores del siglo XII, de los poetas liricos en lengua occitana que proponían un arte de amar, el amor cortés. Así nació el amor tal como hoy lo entendemos, como un todo, carnal y espiritual, sexual y emocional. 

El amor es también el asunto más frecuente de los poemas seleccionados, comentados y recitados en los casi tres años de existencia de este blog que, como os dije hace unos días, está en proceso de transformación, de cambio. En estas vísperas de San Valentín, podría haceros una selección larguísima de poemas de amor que han pasado por aquí, pero para no abrumaros he preferido seleccionaros solo cinco, y muy diversos: dos de nuestros siglos de Oro, uno de Lope de Vega y otro de sor Juana Inés de la Cruz; y tres mucho más recientes, del siglo XX, de Gabriela Mistral, de Alfonsina Storni y de Mario Benedetti

En el primero de ellos, un soneto, Lope es un ciclón que arranca con esta fuerza:

Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;

Nos describe el amor con un torrente de verbos y adjetivos encadenados entre comas y puntos y comas y al tiempo nos está contando no sólo toda su larga vida amorosa sino también todos los altibajos, tensiones, contradicciones, sabores y sinsabores del amor en general, del amor de cualquier ser humano.

En el de sor Juana Inés, otro soneto, la novohispana plantea una duda clásica del amor:

Al que ingrato me deja, busco amante;
al que amante me sigue, dejo ingrata;
constante adoro a quien mi amor maltrata;
maltrato a quien mi amor busca constante.

¿Qué es mejor en el amor? ¿Seguir porfiando por la persona que no nos hace ningún caso o entregarnos a la que no nos interesa pero que nos adora?

Salto en el tiempo, ya estamos en el siglo XX. La chilena Gabriela Mistral dedica un largo y bellísimo poema a una de las principales manifestaciones del amor: el beso.

Yo te enseñé a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.

Como habréis visto, no habla solo de besos de amor. Habla de besos de todo tipo, de amor y de dolor, de lealtad y de traición. 

Muy cerca en el tiempo y en el espacio, un poema de la argentina Alfonsina Storni sobre la fugacidad del amor:

Tú seguirás tu ruta; yo la mía
y ambos, libertos, como mariposas
perderemos el polen de las alas
y hallaremos más polen en la flora.

Sobre la fugacidad, la caducidad y la volatilidad del amor. Sobre la cadena de amores sucesivos, uno tras otro; sobre el ciclo continuo de enamoramiento / desenamoramiento / nuevo enamoramiento tan frecuente en las relaciones humanas reales como infrecuente en la literatura, donde abunda mucho más el modelo del «amor constante más allá de la muerte» de Quevedo y de tantísimos otros poetas.

Os traigo, por último, al uruguayo Mario Benedetti, uno de los más grandes poetas en español contemporáneos:
 
él probó sólo falta que me quede a dormir
y ella probó por qué no te quedas
y él no me lo digas dos veces
y ella bueno por qué no te quedas

Maravillosa esta crónica poética de la primera cita, el primer beso, la primera noche… de una pareja. Tan sencillo y conmovedor, os decía cuando os lo reseñé, que emociona como si lo que cuenta nos pasara a todos los lectores.

PD. Si no te valen ninguno de esos cinco poemas como regalo de San Valentín para tu pareja, prueba con alguno de estos otros cinco: de Gutierre de Cetina Ojos claros, serenos, de Gutierre de Cetina, de Delmira Agustini, de Pedro Salinas, de Jaime Sabines Espero curarme de ti, de Jaime Sabines, de Gioconda Belli. ¿Tampoco? Hay muchos mas poemas de amor en el blog. Navega. Encontrarás a Pablo Neruda, a Florencia Pinar, a Joan Margarit, a Miguel Hernández, a Garcilaso, a Idea Vilariño, a Rosario Castellanos, a Laura Victoria, a José María Fonollosa, a Carilda Oliver, a Esperanza Clavera… Si el amor es una invención poética, comprobarás que han contribuido a ella muchísimos excelsos poetas en español.