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15 Ene 2021
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Usos y análisis del lenguaje urbano a través del espejo retrovisor de mi taxi.

Daniel Díaz

Taxista, escritor y viceversa. Licenciado en charlas casuales y amante discreto del verso suelto.

Desbarra todo

Subí por una calle a duras penas, derrapando (había nieve), y el hombre de mi espalda me soltó: «Desbarra todo». Al rato, ya solo y móvil en mano, pude comprobar que la palabra «desbarrar» encajaba como un guante más allá de ese preciso contexto. Me explico.

«Desbarrar», según la RAE:

  1. Deslizarse, escurrirse.
  2. Discurrir fuera de razón.
  3. Errar en lo que se dice o hace.

Cabe puntualizar que el hombre quiso referirse no sólo al asfalto helado (y a las ruedas del taxi derrapando), sino a «todo» en general. Incluía, por tanto, la segunda y tercera acepción respecto al mundo actual en su conjunto, y no le faltaba razón: Tras diez meses de pandemia habíamos normalizado el uso de mascarillas, la distancia social o el lavado constate de manos y, aun con esas, el número de contagios no hacía más que dispararse. A esto habría que añadirle una clase dirigente nacional, autonómica y municipal a años luz de comportarse a la altura de las circunstancias, «desbarrando» a cada rato (2) y errando una y otra vez en la estrategia a seguir (3). Ahora confinamos fuerte, ahora confinamos flojo, podemos reunirnos pero pocos (primero 10, luego 6), comercios abiertos aunque sólo hasta media tarde en según qué sitios, o cerrando a mediodía en según qué comunidades, o ahora el vecino de tu calle de enfrente puede salir pero tú no durante los próximos quince días y luego siete más, y no podrás ir al peluquero de la esquina pero sí al bar de justo debajo de tu casa. Hoy no pero mañana sí, y pasado tal vez, y el mes que viene quién sabrá. Un nuevo y carísimo hospital de pandemias, en plural (para la actual pandemia y pandemias futuras) pero sólo apto para enfermos sanos: sin quirófanos (ni agua caliente).

Y vino la nieve y el caos, y dimos en llamarlo «Filomena», como esa tía nonagenaria del pueblo, y otra vez desbarra todo: las medidas (insuficientes), la crisis resultante a sumar a la crisis anterior, el descrédito, el asombro, el noqueo, el hartazgo. Nunca jamás escuché a nadie acertar tanto y con tan pocas palabras: Desbarra todo. Chapeau!

Nota: Chapeau apenas significa «sombrero» en francés, pero en España adjunta el acto de quitarse el sombrero ante alguien en señal de respeto: chapó.