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27 Ene 2020
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Detrás de cada palabra hay un rastro lingüístico que puede delatarte

Sheila Queralt

Perito en lingüística forense. Con mis análisis científicos de la lengua contribuyo a cazar delincuentes.

¿Y si clonan tu voz para cometer un delito?

La Inteligencia Artificial tiene muchas aplicaciones beneficiosas para la sociedad, pero también puede ser usada para fines maliciosos.

En este caso voy a hablarte de uno de ellos, la clonación de la voz para estafar. ¿Has oído hablar de la estafa del CEO? Este tipo de delito tiene como objetivo, por el momento, engañar a grandes compañías para hacer transferencias millonarias a la cuenta del delincuente. 

¿Cómo lo hacen? El modus operandi de estos estafadores es crear una base de datos de entrenamiento que se nutre de vídeos o audios del directivo cuya voz quieren imitar (así que ¡cuidado con lo que subes al mundo digital!) y mediante la inteligencia artificial clonan esa voz. Acto seguido, llaman a un trabajador de su empresa haciéndose pasar por su jefe y le piden que realice una transferencia importante de dinero. En el caso de que el trabajador sospeche o de que la clonación no sea del todo precisa, las excusas que ponen (según los casos registrados hasta la actualidad) es que están conduciendo, tienen poca cobertura o tienen el manos libres puesto. 

Ya se han dado casos en que se ha contratado a lingüistas forenses para analizar si una voz es natural o artificial. Cuando interrogan a una directiva y dice que la voz que aparece en una grabación no es la suya, ¿cómo podemos determinar si le han clonado la voz y verdaderamente no fue ella quien hizo la llamada? Pues siento decirte que no te lo puedo contar para que los delincuentes no mejoren sus sistemas. Sin embargo, para tu tranquilidad, te diré que no todo el mundo puede hacerlo, ya que se necesita un tipo de tecnología que no es barata y poder entrenarla mediante muchas muestras de voz (mínimo unas dos horas de grabación). Ah, y esas muestras tienen que ser de buena calidad (no puede haber ruidos de fondo, tienen que tener unas ciertas características de formato, etc.). Además, por ahora solo lo hacen con empresas muy adineradas.

¿Pero qué pasará cuando este tipo de tecnología sea de acceso abierto y fácil de utilizar? Estos últimos meses hemos visto cómo la técnica del deepfake se está utilizando en la televisión de forma habitual. Por ejemplo, en El Intermedio (Wyoming se transformó en el Rey Felipe para dar el mensaje de Nochebuena) o para promocionar las campanadas de la Sexta (Iñaki López y Cristina Pardo se transformaron en Ramonchu y Pedroche). Así que, aunque todavía suene a ciencia ficción, en realidad no estoy hablando de nada que no pueda pasar en un futuro muy cercano. Mantente alerta.