¿Puede la palabra del año ser una amenaza?
Emoji es la palabra del año 2019 según Fundéu y, a pesar de que los emojis no son palabras sino representaciones visuales, como ellas, tienen significado y significante y aportan el toque pragmático que muchas veces echamos de menos en nuestras comunicaciones en línea.
Generalmente, podemos decir que aportan información sobre el sentido que le damos a una frase y permite saber si hemos dicho algo con ironía (😏), si nos desencajamos de la risa (🤣), si algo nos da vergüenza (🙈) o si estamos amenazando (😠) y (¡cómo no!) los lingüistas forenses los analizamos.
Pero cuidado con ese generalmente, porque, a veces, pueden llevar a malas interpretaciones. ¿Qué quiere decir alguien con un «Ya sabes qué hacer 😈» ¿Podría considerarse una amenaza? Pero ¿y si el autor de ese mensaje afirma que «Solo estaba bromeando»? Y ¿qué hay de mensajes escritos solo con emojis? Como lingüista forense, ya he tenido que analizar varios mensajes para determinar el valor intimidatorio de los emoticonos y testificar sobre si lo más probable era que se tratara de una amenaza real o de un malentendido.
Por cierto, hay que saber si un emoji es el mismo en el dispositivo del que lo envía y en el del que lo recibe. En un caso real se tuvo que comprobar la naturaleza de la pistola que envió el acusado porque, claro, no es lo mismo decir «Ya he comprado todas las pistolas» enviando una pistola de agua 🔫 que enviando una pistola real 
. Puedes comprobar que muchas veces la pistola que envías es distinta a la que recibe la otra persona en las notificaciones (e incluso en la conversación). Si quieres, envía a alguien una pistola para comprobarlo, pero, por favor, ¡solo a personas a las que hayas advertido con antelación! ¡Y deja claro que se trata únicamente de una comprobación! No te vayas a meter en líos…
Ah, también ten en cuenta que el significado que le da cada uno al emoticono puede variar. Para algunos, 🙏 puede significar «Ya puedes rezar por tu vida», para otros, «Pide perdón», para otros «Te lo suplico» y para otros «Tranquilo, relájate, que no te va a pasar nada. Sigue con el yoga».
El lingüista forense siempre deberá ofrecer las posibles interpretaciones de un emoji en base a su contexto y no al análisis del dibujito aislado. Así que, si quieres evitar acusaciones, cuidado con los emojis que usas y asegúrate de que se interpreta como quieres en el contexto de tu conversación. Además, harías bien en ir cambiando de emojis, porque te puedo pillar por tus preferencias. No serías el primero…
¡Feliz entrada de año! 🥂😘
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