PATROCINADORES
INSTITUCIONES
Junta castilla
jcm

Archiletras

21 Dic 2022
Compartir
Perú

Lóxoro, un escudo léxico para las mujeres trans

Alfonso C. Cobo Espejo

Aunque se desconoce cuándo comenzó exactamente, hubo un momento en que las mujeres trans peruanas buscaron una fórmula para esquivar las múltiples agresiones que sufrían y poder hablar con mayor seguridad. Encontraron refugio en el lóxoro, un vocabulario encriptado que solo ellas entienden

Hace poco más de una década, la cineasta peruana Claudia Llosa retrató en uno de sus documentales a un grupo de mujeres trans al caer la noche en los bajos fondos de Lima. Conversaban en un español ininteligible: hablaban lóxoro o loxoro, pues las personas que lo utilizan lo pronuncian indistintamente de las dos maneras.

El trabajo de Llosa sirvió para mostrar al gran público una realidad que ya existía desde mucho antes: la discriminación y el estigma que sufre la comunidad trans en países como Perú. Además, sirvió para dar a conocer el léxico que este colectivo había creado para mantener su intimidad y defenderse de posibles acciones violentas.

«Llamarlo lengua o dialecto del español sería sobredimensionarlo», advierte antes de profundizar en el tema Ernesto Cuba, candidato doctoral de Lingüística Hispánica de la Universidad Pública de Nueva York, quien está realizando su tesis sobre el uso del lenguaje de las mujeres trans.

¿Qué es entonces el lóxoro? «Podríamos decir que es una práctica, un argot propio de grupos marginados; en este caso, de las mujeres trans peruanas que buscan protegerse mediante conversaciones incomprensibles para la mayoría de la gente. Algo similar al «polari», el lenguaje que crearon con este fin los homosexuales en Inglaterra», afirma Cuba.

¿Y cómo se construye este argot? Consiste en alterar algunas palabras dentro de un determinado enunciado. Esta alteración se produce añadiendo infijos como «xara», «xere», «xiri», «xoro» o «xuru» a las sílabas que componen una palabra.

Por ejemplo, la palabra «casa» se diría «cáxara saxara». El propio término «lóxoro» nace de la primera sílaba de la palabra «loca», que se usa para hablar de hombres afeminados en el contexto que nos ocupa. Así pues, la palabra «loca» al completo sería «lóxoro cáxara».

Suelen ser palabras sueltas las que sufren cambios, no todo el enunciado. Muchas de ellas tienen que ver con la prostitución, con las mujeres cisgénero, con la belleza o con las intervenciones quirúrgicas a que se someten las personas trans.

Normalmente, es un lenguaje que se da en espacios efímeros y extremos como el trabajo sexual callejero, las redadas policiales u otras situaciones que puedan entrañar riesgo y violencia para el colectivo trans.

Nada sencillo de dominar

Se trata de una práctica mucho más compleja de lo que parece. «A raíz de mis investigaciones y de las más de 30 entrevistas que he realizado a mujeres trans, he podido comprobar que casi ninguna dice dominar bien el lóxoro. Asimismo, les cuesta explicar en qué consiste», asegura Cuba.

Tan extraño y complicado resulta, que muchos peruanos le llaman «hungarito», pues la consideran una lengua sumamente difícil de aprender y lejana, algo así como cuando decimos en España aquello de «me suena a chino».

Si has leído hasta aquí, es posible que te estés preguntando: ¿acaso no estamos desvelando el lenguaje secreto de las mujeres trans de Perú? Podría ser que sí, pero solo en parte, pues el lóxoro es un argot vivo, en constante mutación, que incorpora términos nuevos y evoluciona de generación en generación.

Así, con el paso de los años, ha incorporado nuevas sílabas como «kuti o kutí», «ipi», «apa», etc., acuñadas por transexuales jóvenes, lo que lo hace más complicado para la gente que no pertenece al colectivo trans.

Emblema y divertimento

Otra de las razones de que siga vigente este argot, con independencia de que, en ocasiones, se haya desvelado cómo se construye, es la vulnerabilidad que siguen sufriendo las personas trans en Perú. La vitalidad del lóxoro implica que todavía queda mucho por hacer. En este sentido, se ha convertido en una marca de identidad para toda la comunidad LGBTIQ peruana.

El que sea también un emblema ha permitido que se popularicen ciertas estructuras léxicas y que no se use solo para ocultar, sino también para divertirse, como juego de palabras.

Ernesto Cuba comparte con Archiletras unos mensajes que publicaban en redes sociales un grupo de hombres gais:

—Hungarito: «Amigx te me caéste, tu maxara es bien muxuru, tiene voz de bebikuti».

—Español estándar: «Amigo, te me caíste. Tu marido es bien mujer. Tiene voz de bebita».

El especialista peruano lamenta no haber escuchado el lóxoro espontáneamente, en un contexto real. Eso mismo ocurre con esta crónica, que ya termina. No obstante, un paseo por Youtube nos servirá para descubrir lo peculiar que es, tanto en su construcción como en su comprensión, pues se habla a una velocidad endiablada.

 

Esta crónica es uno de los contenidos del número 16 de la publicación trimestral impresa Archiletras / Revista de Lengua y Letras.
Si desea suscribirse o adquirir números sueltos de la revista, puede hacerlo aquí https://suscripciones. archiletras.com/