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18 Nov 2022
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Lo que va y viene en el mundo editorial.

Begoña Piña

Periodista. Infiltrada desde hace años en la Cultura, leo todo lo que puedo y siempre me quedo con ganas de mucho más.

 “Mi querido pequeño” Camus

Plataforma Editorial publica Cartas a mi maestro. Fragmentos seleccionados y correspondencia de Albert Camus a su maestro, nunca antes aparecida íntegramente, y donde el Premio Nobel expresa su gratitud a Louis Germain, su antiguo profesor en Argel. “Sin él no habría sucedido nada de todo esto”.

La relación epistolar entre estos dos hombres se inició con unas entrañables letras de Germain a Camus: “Mi querido pequeño: me resulta fácil imaginar que mi carta te sorprenderá. Debes de preguntarte quién puede escribirte de esta forma y permitirse estas confianzas. Se trata de alguien que te quiere mucho y por quien estoy convencido de que tú también sientes afecto.

¿A que nunca adivinarías que soy el señor Germain, de Argel, tu antiguo maestro?”

A partir de ahí se estableció una comunicación por carta en la que Albert Camus expresaba su reconocimiento a su profesor. Al mismo tiempo, el conjunto de misivas constituye un homenaje a los educadores y a la labor que realizan.

Junto a las cartas, Plataforma Editorial publica un fragmento de El primer hombre, libro en el que aparecía el personaje del profesor M. Bernard. Esta era la obra en la que trabajaba Camus en el momento de su muerte, un texto sin puntos ni comas donde el escritor rememoraba su infancia en Argel, junto a una abuela autoritaria y una madre exhausta por el trabajo en casas ajenas. En ella ya hay un reconocimiento a la figura de aquel maestro.

“Sin usted, sin la mano afectuosa que tendió al niño pobre que era yo, sin su enseñanza y su ejemplo, no hubiese sucedido nada de todo esto. No es que dé demasiada importancia a un honor de este tipo. Pero ofrece por lo menos la oportunidad de decirle lo que usted ha sido y sigue siendo para mí, y de corroborarle que sus esfuerzos, su trabajo y el corazón generoso que usted puso en ello continúan siempre vivos en uno de sus pequeños escolares, que, pese a los años, no ha dejado de ser su alumno agradecido. Lo abrazo con todas mis fuerzas”, escribió Albert Camus a Louis Germain cuando recibió el Premio Nobel.