La herida de Roberto Saviano
“No es cierto que de la batalla o vuelves vivo o no vuelves; en caso de que vuelvas, volverás herido. Lo que estáis a punto de leer es mi herida”. Son las palabras del escritor Roberto Saviano que se ha pasado a la novela gráfica para narrar nada menos que su vida en clandestinidad, Todavía estoy vivo (Reservoir Gráfica). Las ilustraciones son de Asaf Hanuka.
En esta obra, Saviano relata los últimos quince años de su vida, en los que se ha visto obligado a vivir escondido, por estar amenazado de muerte por la Camorra. Con la complicidad de Asaf Hanuka, el autor mira al pasado, a la libertad perdida, recupera la memoria del niño que fue apasionado por las historietas… y llega a la claustrofobia del presente, “al precio a pagar por haber alzado la voz y que lo obliga a la vivir siempre pegado a sus escoltas. Es la vida de un hombre herido, pero que sigue luchando”.
El periodista italiano fue sentenciado por la Camorra tras escribir su libro Gomorra. Los mafiosos que le amenazaron de muerte recibieron su condena después de un largo proceso judicial. Y él sigue en la clandestinidad. “Aquí se cuenta una resistencia llevada a cabo con la palabra como única artillería y dentro del perímetro del propio cuerpo”.
En una entrevista concedida en Italia, Saviano explicó por qué apostó por la novela gráfica para narrar en ella una historia tan íntima. “Revivir, contar y poner orden en tu propia historia (…) es como desnudarse, un gesto simple y natural, pero al mismo tiempo difícil y profundo. ¿Cómo se narra el sentimiento de culpa por seguir vivo? Solo las imágenes pueden ayudar a universalizar el dolor”.