Un truco de Avellaneda
Basta incluir el vocativo «Sancho» en cualquier frase sentenciosa para que parezca una cita del Quijote: «Ser o no ser, Sancho, esta es la cuestión»; «Volverán las oscuras golondrinas, Sancho, en tu balcón sus nidos a colgar»; «Vivir así es morir de amor, Sancho, y por amor tengo el alma herida», etc.
Óscar Esquivias