¡Pobre Rigoberto!
Al diccionario de la RAE no le gusta explicar los conceptos con ejemplos y, cuando los hay, a veces se adivina una venganza secreta en ellos. En 2001, ilustraron el término «aposición» con la frase «El tonto de Rigoberto». ¿Sería Rigoberto un camarero torpe que tiró el café encima del director?
Óscar Esquivias