Hidronimia
Eduardo Martínez de Pisón conoció a un cartógrafo que, al dibujar mapas, se inventaba arroyos recónditos y los bautizaba con su apellido. Esos rincones umbríos por donde mana el falso López (o como se llame ese señor) me atraen mucho. ¡Cuánto me gustaría bañarme en sus aguas de fantasía!
Óscar Esquivias