Desnudez
Era un señor tan pudibundo que en invierno no salía de casa porque todos los árboles estaban desnudos de hoja. Escribía airadas cartas al director del periódico local pidiendo al ayuntamiento que los talara o, al menos, los cubriera con lonas: Quien quiera ver guarradas, que se vaya al campo.
Óscar Esquivias