Cartas y carteristas
Por mucho que lo intentara, don Heraclio Fournier no sabía poner cara de póker. En cambio, dominaba las señas del mus y se le veía a sus anchas jugando al chinchorro o al tute con los amigotes. Un día salió a pasear por Vitoria con cara de blackjack, le tomaron por un turista y le robaron la cartera.
Óscar Esquivias